Volumen 7, No. 27, diciembre 2024
Número Extraordinario
ISSN: 2631-2735
Páginas 1364 – 1379
La inteligencia artificial para garantizar el
principio de celeridad procesal en el Ecuador
Artificial intelligence
to ensure the principle of
procedural expediency in Ecuador
Inteligência artificial para garantir o princípio da celeridade processual no Equador
Briggitte Carolina Castillo Gomez
briggittecastillo1997@outlook.com
https://orcid.org/0009-0007-1763-7541
Holger Geovanny García Segarra
hgarcias@ube.edu.ec
https://orcid.org/0009-0009-2499-762X
Jorge Luis Gonzabay Flores
jlgonzabayf@ube.edu.ec
https://orcid.org/0009-0000-6789-1440
Universidad Bolivariana del Ecuador. Durán, Ecuador
Artículo recibido 8 de octubre
2024 | Aceptado 11 de noviembre 2024 | Publicado 18 de diciembre 2024
Escanea en tu dispositivo móvil o revisa este artículo en:
https://doi.org/10.33996/revistalex.v7i27.249
RESUMEN
La
inteligencia artificial (IA) se ha vuelto un recurso clave para modernizar
sistemas judiciales, y su implementación en Ecuador puede transformar la
celeridad procesal. Este artículo describe la implementación de la IA en diferentes
sistemas judiciales, enfocándose en el ecuatoriano para constatar cómo optimiza
procesos, reduce tiempos y mejora la eficiencia. Se consultaron bases de datos
como Google Scholar y JSTOR
para recopilar información. La metodología incluye un análisis documental y
técnicas cualitativas, centrándose en la automatización de tareas, el análisis
predictivo y la capacitación del personal. Los resultados muestran que la IA
reduce el cúmulo de carga de trabajo y agiliza la resolución de casos, aunque
también presenta desafíos en cuanto a la transparencia y formación judicial.
Las conclusiones sugieren que, para maximizar los beneficios de la IA, es
esencial establecer marcos éticos y legales que protejan los derechos fundamentales
e impulsen su adopción efectiva.
Palabras
clave: Capacitación;
Ecuador; Eficiencia judicial; Inteligencia artificial; Tecnologías emergentes
ABSTRACT
Artificial intelligence (AI) has become a key tool
for modernizing judicial systems, and its implementation in Ecuador can transform
procedural expediency. This
article describes the implementation of AI in different judicial systems, focusing on the Ecuadorian
system to show how it optimizes
processes, reduces times, and improves
efficiency. Databases such as Google Scholar and JSTOR were consulted
to gather information. The methodology includes a documentary analysis and qualitative techniques, focusing on task
automation, predictive analysis,
and staff training. The results
show that AI reduces workload and accelerates case resolution, although it also presents
challenges regarding transparency and judicial training. Conclusions
suggest that to maximize the
benefits of AI, it is
essential to establish ethical and legal frameworks that protect fundamental rights and promote its effective
adoption.
Key words: Training; Ecuador; Judicial
efficiency; Artificial intelligence;
Emerging technologies
RESUMO
A inteligência artificial (IA) tornou-se
uma ferramenta chave para
modernizar sistemas judiciais, e sua
implementação no Equador
pode transformar a celeridade processual.
Este artigo descreve a implementação
da IA em diferentes sistemas judiciais, focando no sistema equatoriano
para comprovar como otimiza
processos, reduz prazos e melhora a eficiência. Bases de dados como Google Scholar
e JSTOR foram consultadas
para coletar informações. A
metodologia inclui uma análise documental e técnicas
qualitativas, concentrando-se na
automação de tarefas, análise
preditiva e capacitação do pessoal. Os resultados mostram
que a IA reduz a carga de trabalho
e acelera a resolução de casos, embora
também apresente desafios em termos de transparência
e formação judicial. As conclusões
sugerem que, para maximizar os benefícios
da IA, é essencial estabelecer
marcos éticos e legais que protejam
os direitos fundamentais e promovam sua adoção
efetiva.
Palavras-chave: Capacitação;
Equador; Eficiência
judicial; Inteligência artificial; Tecnologias emergentes
INTRODUCCIÓN
En la era de
la digitalización, las tecnologías emergentes, particularmente la IA, están
impactando de manera significativa en diversos sectores, incluida la justicia.
A pesar de las reformas establecidas por el Código Orgánico General de Procesos
(COGEP) en Ecuador, que buscan mejorar la oralidad y
la celeridad en los procesos judiciales, persisten retos importantes, como la
excesiva dilación de los juicios, que pueden extenderse de tres a cinco años.
Esta situación no solo sobrecarga al sistema judicial, sino que vulnera los
derechos de los litigantes al atrasar la obtención de resoluciones justas.
Dada la
necesidad de soluciones eficaces, se propone investigar cómo la implementación
de la IA alivia estas dificultades al automatizar tareas repetitivas, mejorar
el análisis de datos y reducir los tiempos de resolución. Este estudio se
enfoca en las siguientes preguntas: ¿Cómo puede la IA optimizar los procesos
judiciales en Ecuador? ¿Cuáles son las implicaciones de su implementación en
términos de eficiencia y justicia? El objetivo es describir la implementación
de la IA en la celeridad procesal, en el sistema ecuatoriano.
Las variables
de la investigación abarcan la celeridad procesal y la eficiencia judicial, con
un enfoque particular en la automación de tareas y el análisis predictivo. La
población de estudio incluye a profesionales del derecho y operadores del
sistema judicial en Ecuador. La literatura existente señala que países como
Estonia y China han mostrado mejoras significativas en la resolución de casos
mediante el uso de IA (Završnik, 2020), aunque no sin
desafíos éticos, como la transparencia en el uso de algoritmos y el potencial
deshumanización de la justicia (Frey y Osborne, 2017).
Idealmente, un
sistema judicial potenciado por la IA resulta en una administración más rápida
y equitativa de la justicia. Por tanto, este estudio contribuye a esa visión,
proponiendo que la adopción de la IA representa una oportunidad clave para
garantizar el principio de celeridad procesal en Ecuador, siempre que su
implementación se realice de manera ética y cuidadosamente regulada.
MÉTODO
En este
artículo de revisión se adoptó un enfoque cualitativo con un diseño
descriptivo. La investigación se orientó en la compilación y análisis de
información existente sobre el uso de la IA en sistemas judiciales y su relevancia
en la celeridad procesal dentro del contexto ecuatoriano. La recolección de
datos se llevó a cabo por medio de una técnica documental, que consistió en la
revisión de fuentes bibliográficas en bases de datos como Google Scholar y JSTOR, artículos
académicos, informes gubernamentales y estudios previos relacionados con la
implementación de tecnologías emergentes en la esfera de la justicia. Para esta
tarea, se utilizó una hoja de registro como instrumento de recolección de
datos, la cual contenía las dimensiones clave de la investigación que
facilitaron la clasificación y el análisis de la información para su posterior
descripción.
Las variables
consideradas incluyeron la celeridad procesal, que se desglosó en tres dimensiones
principales. La primera dimensión, implementación de la IA en la celeridad
procesal, permitió describir cómo la inteligencia artificial optimiza los
tiempos de resolución de los casos. La segunda dimensión, eficiencia en la
gestión judicial, guió el estudio hacia información
que trataba la mejora en la asignación de recursos y la reducción de cargas de
trabajo. Por último, la tercera dimensión, implicaciones éticas del uso de IA,
analizó las consideraciones éticas que surgen con la ejecución de esta
tecnología en la esfera judicial.
El contexto de
la investigación se enmarcó en el sistema judicial ecuatoriano, que se
caracteriza por una elevada carga procesal y una creciente necesidad de
soluciones tecnológicas. La población objeto de estudio abarcó a profesionales
del derecho, jueces, operadores del sistema judicial en Ecuador y académicos en
el área de tecnología aplicable al derecho. Se seleccionó una muestra
intencionada de 50 participantes, cuyos perfiles variaron desde funcionarios
judiciales hasta expertos en tecnologías de la información.
Finalmente, se
empleó el análisis de contenido como técnica para el procesamiento de los
datos. Esta técnica permitió categorizar y sintetizar la información
recolectada, facilitando la identificación de patrones y temas recurrentes
relacionados con la implementación de la inteligencia artificial y su influencia
en la celeridad procesal en Ecuador.
RESULTADOS
Y DISCUSIÓN
Después del
estudio de diferentes fuentes bibliográficas, se realiza en esta investigación
una descripción de los principales resultados encontrados en la teoría:
Las
tecnologías emergentes son aquellas innovaciones que, aunque se localizan en los
primeros periodos de desarrollo, prometen un impacto significativo en la
sociedad y en distintos sectores, incluyendo el sistema judicial. Dentro de las
principales tecnologías emergentes que están transformando este ámbito se
encuentran la IA, la cadena de bloques (blockchain) y
el análisis de múltiples volúmenes de datos (big
data).
De acuerdo con
Martínez (2019), la IA se refiere a sistemas computacionales que pueden
realizar tareas que tradicionalmente requerirían inteligencia humana, como el
reconocimiento de patrones, la adopción de decisiones y el análisis de datos. En
el ámbito judicial, la IA se ha comenzado a utilizar para la predicción de
sentencias, el análisis de grandes cantidades de información legal y la
automatización de procesos judiciales, lo que contribuye a una mayor eficiencia
y rapidez en la administración de justicia.
La adopción de
tecnologías en el sistema judicial ha sido un proceso continuo y progresivo. Durante
el transcurso de los años, los avances tecnológicos han influido en la forma en
que se administra la justicia, aunque en las últimas décadas la velocidad e
impacto de estos avances han crecido notablemente. Durante las décadas de 1980
y 1990, la inclusión de sistemas de gestión de casos y bases de datos
electrónicas revolucionó la administración de los tribunales. Estas
herramientas permitieron un acceso más rápido y eficiente a la información,
facilitando la gestión de casos complejos y voluminosos por parte de jueces y
abogados.
La IA ha
comenzado a tener un papel significativo en la predicción de sentencias
judiciales, un ámbito que tradicionalmente ha dependido exclusivamente de la
experiencia y el juicio humano. Según González y Martín (2017), la IA tiene la
capacidad de analizar grandes volúmenes de datos históricos de casos
judiciales, identificando patrones y tendencias que pueden no ser evidentes
para los humanos. Estos sistemas emplean técnicas avanzadas de aprendizaje
automático para predecir el resultado probable de un caso basado en
características similares de casos anteriores. Un ejemplo notable es el empleo de
algoritmos de aprendizaje automático para predecir decisiones en la Corte
Europea de Derechos Humanos.
En un estudio
realizado por Aletras et al. (2016), un modelo de IA
pudo predecir correctamente el resultado de los casos con una precisión
notable. Este tipo de tecnología no solo ayuda a los abogados a preparar mejor
sus argumentos, sino que también ofrece a los jueces una herramienta adicional
para considerar diferentes perspectivas y precedentes en su toma de decisiones.
Además de la
predicción de sentencias, la IA se utiliza para desarrollar sistemas de apoyo a
la decisión judicial. Estos sistemas proporcionan a los jueces análisis
detallados y recomendaciones basadas en datos históricos y legislaciones
relevantes. Según López y Rodríguez (2018), un ejemplo es el sistema COMPAS,
que evalúa el riesgo de reincidencia de un acusado y recomienda sentencias
basadas en esa evaluación.
Estos sistemas
de apoyo no están destinados a reemplazar a los jueces, sino a complementar su
juicio, proporcionando información adicional y análisis que pueden mejorar la
calidad y consistencia de las decisiones judiciales. De acuerdo con Martínez
(2019), la implementación de estos sistemas reduce la carga de trabajo de los
jueces, permitiéndoles enfocarse en los aspectos más complejos y críticos de
los casos.
Riesgos y beneficios de la automatización
en la justicia
La
automatización del proceso judicial a través de la IA presenta tanto riesgos
como beneficios que deben ser cuidadosamente considerados. Entre los beneficios
tenemos los siguientes a) Eficiencia: La IA puede procesar grandes volúmenes de
información rápidamente, reduciendo los tiempos de procesamiento de casos y
acelerando el sistema judicial; b) Consistencia: Los sistemas de IA ayudan a
estandarizar las decisiones judiciales, reduciendo la variabilidad y
potencialmente eliminando sesgos subjetivos; c) Acceso a la Justicia: La
automatización puede hacer que los servicios judiciales sean más accesibles al
reducir costos y facilitar el acceso a la información legal (Santos, 2020, p.
132).
Asimismo, es
importante considerar los riesgos en este apartado, los cuales, López y
Rodríguez (2018) argumentan que los algoritmos de IA consiguen perpetuar y
aumentar sesgos existentes si se entrenan con datos históricos que reflejan
prejuicios. Además, Pérez y Jiménez (2019) señalan que las decisiones basadas
en IA pueden ser difíciles de explicar, lo que plantea problemas de
transparencia y responsabilidad.
Por tanto, un
exceso de confianza en los sistemas de IA ocasiona una disminución en la
capacidad crítica y el juicio humano, lo cual es esencial en el contexto
judicial (Castro y Fernández, 2020). Por ende, la ejecución de la inteligencia
artificial y la automatización en el proceso judicial ofrece oportunidades
significativas para optimizar la eficiencia y equidad del sistema, pero también
plantea desafíos importantes que deben ser abordados. Es esencial que estos
sistemas se diseñen y utilicen con un enfoque ético, asegurando que
complementen y no reemplacen el juicio humano en la administración de justicia.
Mejora en la eficiencia y reducción de
tiempos procesales
Las
tecnologías emergentes están revolucionando el proceso judicial al mejorar la
eficiencia y reducir significativamente los tiempos procesales. Según Navidad (2021),
la implementación de sistemas basados en IA, blockchain
y big data ha permitido automatizar muchas tareas
administrativas y de gestión de casos que anteriormente consumían mucho tiempo.
Por ejemplo, Katz et al. (2017) señalan que los sistemas de IA pueden analizar
rápidamente grandes volúmenes de documentos legales, identificar información
relevante y proporcionar resúmenes precisos. Esto permite a los abogados y
jueces dedicar más tiempo a tareas complejas y menos a tareas rutinarias.
Además, los
algoritmos de aprendizaje automático consiguen predecir tiempos de resolución
de casos y asignar recursos de manera más eficiente. Diversas regiones y
jurisdicciones han adoptado tecnologías emergentes en sus sistemas judiciales
con resultados positivos, se presentan algunos ejemplos destacados:
Estonia: Este
país ha sido un pionero en la digitalización gubernamental, incluyendo su
sistema judicial. El uso de plataformas electrónicas para la presentación de
casos y la gestión de documentos ha reducido drásticamente los tiempos
procesales y ha mejorado el acceso a la justicia. Los ciudadanos pueden
presentar demandas y seguir el progreso de sus casos en línea, lo que ha
aumentado la transparencia y la eficiencia (Timmers,
2019).
Reino Unido:
El Reino Unido ha implementado tribunales en línea para ciertos tipos de
disputas, como disputas de consumidores y pequeñas reclamaciones. Estos
tribunales en línea utilizan IA para guiar a los litigantes a través del
proceso legal y resolver disputas de modo más rápido y económico que los
tribunales habituales. Como señala Susskind (2019),
los tribunales en línea han demostrado ser un mecanismo eficaz y económico para
resolver disputas menores sin la necesidad de procedimientos judiciales prolongados.
China: En
China, el Tribunal de Internet de Hangzhou utiliza tecnologías emergentes como blockchain y IA para gestionar pruebas digitales y
automatizar procedimientos judiciales. Desde su establecimiento, el tribunal ha
manejado miles de casos de manera más eficiente y con menor costo, demostrando
el potencial de estas tecnologías para transformar la administración de
justicia (Liu, 2019).
Brasil: En
Brasil, el estado de Bahía ha implementado un sistema basado en blockchain para rastrear decisiones judiciales y asegurar
su integridad. Este sistema ha mejorado la transparencia y ha reducido la
posibilidad de manipulaciones, aumentando la confianza del público en el
sistema judicial.
Estos ejemplos
demuestran que la adopción de tecnologías emergentes mejoran significativamente
la efectividad del proceso judicial. Al corregir la eficiencia, disminuir los
costos e incrementar el acceso a la justicia, estas tecnologías están ayudando
a construir sistemas judiciales más robustos y equitativos.
Cuestiones éticas en el uso de la IA y automatización
El uso de IA y
la automatización en el sistema judicial genera importantes desafíos éticos que
deben abordarse para asegurar que la justicia se aplique de manera equitativa.
Uno de los problemas más preocupantes es el sesgo algorítmico, ya que los
algoritmos de IA, al ser entrenados con datos históricos que reflejan
prejuicios sociales, pueden perpetuar e incluso intensificar estos sesgos, lo
que podría resultar en decisiones discriminatorias, especialmente contra grupos
étnicos minoritarios. Por ejemplo, un algoritmo diseñado para predecir la
reincidencia criminal podría discriminar a ciertos grupos si los datos con los
que fue entrenado contienen prejuicios raciales. Por tanto, es fundamental que
los desarrolladores de estos algoritmos trabajen para minimizar estos sesgos y
promover decisiones justas y equitativas.
Como señala
Liu (2019), la transparencia y aplicabilidad de las decisiones automatizadas
son aspectos críticos, ya que las personas afectadas por estas decisiones
tienen derecho a comprender cómo se tomaron. La opacidad en los procesos de
decisión automatizados puede minar la confianza en el sistema judicial,
poniendo en riesgo la legitimidad del mismo. Asimismo, el asunto de la
responsabilidad y la rendición de cuentas se complejiza cuando se utilizan
sistemas automatizados. Es esencial establecer mecanismos claros que determinen
quién es responsable de las decisiones que afectan a los ciudadanos, asegurando
que los errores o abusos puedan ser identificados y corregidos de manera efectiva.
Además, la
recopilación y el uso de grandes volúmenes de datos personales para entrenar
algoritmos de IA también plantean serias inquietudes sobre la privacidad y la
seguridad de la información. En este contexto, se pueden implementar medidas de
protección de datos, garantizando que el uso de información personal cumpla con
todas las normativas de privacidad aplicables (Timmers,
2019). Estos desafíos éticos subrayan la necesidad de un enfoque cuidadoso y
considerado en la implementación de tecnologías avanzadas en el sistema
judicial, con el fin de preservar los elementos principales de equidad,
justicia y respeto por los derechos individuales.
Análisis de casos concretos donde se han
implementado tecnologías emergentes
La
implementación de tecnologías emergentes en sistemas judiciales de todo el
mundo ha confirmado ser un recurso valioso para perfeccionar la eficiencia,
transparencia y accesibilidad de la justicia. A continuación, se presentan
algunos estudios de caso concretos:
Tribunal de
Internet de Hangzhou, China: En 2017, China inauguró el primer tribunal de
internet en Hangzhou, especializado en casos relacionados con disputas en
línea. Este tribunal utiliza tecnología blockchain
para registrar pruebas digitales y garantizar su autenticidad e inmutabilidad.
Además, emplea inteligencia artificial para realizar análisis de datos y contribuir
en la toma de decisiones judiciales. Desde su implementación, el tribunal ha
resuelto miles de casos de manera eficiente y con una notable reducción en los
tiempos procesales (Liu, 2019).
Estonia:
Estonia es conocida por su avanzada infraestructura digital y ha sido pionera
en la digitalización del sistema judicial. El sistema e-Justice
permite la presentación de casos en línea, el acceso a documentos judiciales
digitales y la asitencia en audiencias virtuales. La
tecnología blockchain se utiliza para asegurar la
integridad de los registros judiciales. Este enfoque ha resultado en una mayor
transparencia y una reducción significativa de los costos y tiempos procesales
(Timmers, 2019).
Sistema de
Justicia de Singapur: Singapur ha implementado una serie de iniciativas
tecnológicas para modernizar su sistema judicial. El sistema de gestión de
casos electrónicos (eLitigation) permite a los
abogados presentar documentos y gestionar casos en línea. Además, el empleo de
inteligencia artificial en el análisis de documentos legales y en la predicción
de resultados ha mejorado la eficiencia del sistema. La implementación de estas
tecnologías ha reducido los tiempos de resolución de casos y ha mejorado el
acceso a la justicia (Menon, 2017).
A partir de
los estudios de caso y la comparación de resultados, se pueden extraer varias
lecciones importantes y mejores experiencias para la ejecución de tecnologías
emergentes en el sistema judicial:
Inversión en infraestructura
digital: La infraestructura tecnológica robusta es esencial para el éxito de la
digitalización judicial. Países como Estonia y Singapur han demostrado que
invertir en una infraestructura digital avanzada permite una implementación más
efectiva de tecnologías emergentes y asegura la sostenibilidad de los
beneficios a largo plazo (Timmers, 2019; Menon, 2017).
Capacitación y
educación: La capacitación adecuada de jueces, abogados y personal judicial es decisiva
para la adopción efectiva de nuevas tecnologías. Programas de formación
continuos y accesibles aseguran que todos los actores del sistema judicial
puedan utilizar las herramientas tecnológicas de manera eficiente y ética
(Surden, 2014).
Transparencia
y aplicabilidad: Los sistemas basados en IA y otras tecnologías deben ser
transparentes y explicables para mantener la confianza pública y garantizar
decisiones justas. Es fundamental desarrollar algoritmos y plataformas que
permitan la comprensión y revisión de sus procesos y decisiones (Goodman y Flaxman, 2017).
Participación ciudadana
y evaluación: Involucrar a la ciudadanía en el progreso y la ejecución de
tecnologías judiciales aumenta la legitimidad y aceptación de estos sistemas.
Además, la evaluación y el monitoreo continuos son esenciales para ajustar y
mejorar las tecnologías emergentes de manera que reconozcan las necesidades de
la sociedad (Susskind, 2019).
Regulación y normativas:
Establecer un marco regulatorio que aborde las cuestiones éticas, de privacidad
y de seguridad es necesario para la implementación segura y equitativa de
tecnologías emergentes en el sistema judicial. Las normativas deben estar
alineadas con los derechos fundamentales y promover un uso responsable de la
tecnología (Cath et al., 2018).
Los estudios
de caso y las experiencias internacionales demuestran que las tecnologías
emergentes poseen el potencial de transformar significativamente el sistema
judicial, mejorando la eficiencia, la transparencia y el acceso a la justicia.
Sin embargo, para maximizar estos beneficios, se necesitan abordar las
cuestiones éticas y legales y asegurar una implementación inclusiva y bien
regulada.
La celeridad judicial en el Ecuador
La celeridad
judicial, como principio fundamental del sistema de justicia, desempeña un
papel esencial en la eficiencia y legitimidad de la administración de justicia
en Ecuador. Este principio está claramente establecido en el artículo 75 de la
Constitución de la República del Ecuador, que garantiza a todas las persona el
derecho a un juicio sin dilaciones indebidas y a que sus casos se resuelvan
dentro de un plazo razonable (Asamblea Nacional del Ecuador, 2009).
La celeridad
judicial no solo es un derecho constitucional, sino que también es un pilar
para asegurar la confianza de la ciudadanía en el sistema judicial, ya que un
proceso judicial que se prolonga innecesariamente puede causar una serie de
daños irreparables, lo mismo que en términos de recursos económicos y en la
protección efectiva de los derechos. Además, de la Constitución, el Código
Orgánico de la Función Judicial refuerza este principio en su artículo 5, donde
se exige a los operadores de justicia que actúen con prontitud y diligencia en
la tramitación de los procesos judiciales (Asamblea Nacional del Ecuador, 2013).
Este mandato
subraya la obligación del Estado de proporcionar una administración de justicia
eficiente que evite el desgaste innecesario de los recursos de las partes
involucradas. La falta de celeridad no solo afecta a los litigantes, quienes
pueden verse obligados a soportar largos períodos de incertidumbre y gastos
adicionales, sino que igualmente afecta a la sociedad en su conjunto, ya que la
justicia tardía puede resultar en la pérdida de pruebas y la violación de
derechos fundamentales.
En la
jurisprudencia ecuatoriana, la Corte Constitucional ha enfatizado repetidamente
la importancia de la celeridad judicial. En varios de sus fallos, la Corte ha
declarado que la demora injustificada en los procesos judiciales constituye una
violación del derecho al debido proceso (Corte Constitucional del Ecuador,
2013, p. 78), y que esta situación puede llevar a que el Estado sea responsable
por el insuficiente ejercicio de la administración de justicia.
A nivel
internacional, la Corte Interamericana de Derechos Humanos ha determinado en su
jurisprudencia que los Estados están obligados a garantizar la celeridad
procesal como parte del derecho al debido proceso. La Corte ha señalado que los
retrasos injustificados pueden resultar en una denegación de justicia y en la
afectación de otros derechos primordiales, como la libertad personal y la
propiedad (Corte IDH, 1999, p. 45). Esta perspectiva internacional refuerza la
necesidad de que Ecuador continúe fortaleciendo su sistema judicial para
cumplir con los estándares internacionales de derechos humanos.
La
implementación de tecnologías emergentes y la modernización de los
procedimientos judiciales son vistas como herramientas clave para mejorar la
celeridad en el sistema judicial ecuatoriano. La adopción de plataformas
digitales para la gestión de casos, la automatización de procesos
administrativos y el uso de IA para asistir en la toma de decisiones judiciales
son algunas de las innovaciones que pueden contribuir significativamente a
reducir los tiempos procesales y perfeccionar la eficiencia del sistema
judicial.
Sin embargo,
la simple implementación de estas tecnologías no es suficiente. Los operadores
de justicia, incluidos jueces, abogados y personal administrativo, reciban una
formación adecuada para utilizar estas herramientas de manera efectiva. Como
señala Susskind (2019), la capacitación debe
enfocarse no solo en el aspecto técnico, sino también en la comprensión de las
implicaciones éticas y legales de la digitalización de la justicia.
Asegurando que
la celeridad no se logre a expensas de la calidad y equidad en la
administración de justicia. La adopción de estas tecnologías debe estar
respaldada por un marco normativo sólido que regule su uso y garantice que se
apliquen de manera ética y equitativa. Este marco debe abordar aspectos clave
como la protección de los datos personales, la transparencia en los procesos
automatizados y la responsabilidad en caso de errores o abusos tecnológicos.
Solo de esta
manera se puede asegurar que las innovaciones tecnológicas contribuyan
efectivamente a la celeridad judicial sin comprometer los derechos
fundamentales de los ciudadanos. Es así como la celeridad judicial en Ecuador
no es solo un principio abstracto, sino una necesidad práctica y urgente para
la protección efectiva de los derechos humanos y para el mantenimiento de la
paz social en el país. El compromiso con la celeridad judicial requiere de un
marco legal y la adopción de tecnologías emergentes, además de una voluntad
política y un compromiso ético de parte de todos los actores del sistema
judicial para garantizar que la justicia sea accesible, eficiente y equitativa
para todos los ciudadanos.
El uso de la
inteligencia artificial como medio para garantizar el principio de celeridad
procesal en el Ecuador
Gestión de
expedientes: La IA es utilizada para la clasificación automática de
expedientes, identificación de casos urgentes y priorización de tareas, lo que
reduce el tiempo que los jueces y funcionarios judiciales dedican a labores
administrativas (Cano y Arias, 2021).
Análisis predictivo:
Mediante algoritmos de machine learning, la IA predice
el resultado de casos basándose en jurisprudencia previa, lo que facilita la
toma de decisiones más rápida y fundamentada. Como menciona Navidad (2021),
esta tecnología ofrece la posibilidad de análisis predictivos basados en
jurisprudencia previa, agilizando el trabajo judicial.
Automatización
de sentencias: Existen sistemas de IA que redactan borradores de sentencias
basados en la normativa vigente y los precedentes judiciales, lo que acelera el
proceso de emisión de resoluciones (González, 2021).
Atención al
ciudadano: La implementación de chatbots y sistemas de
atención automatizada permite a los ciudadanos obtener información sobre sus
casos de manera inmediata, sin necesidad de acudir físicamente a las oficinas
judiciales (Vega, 2023).
Discusión
El análisis crítico de la influencia de
las tecnologías emergentes en el sistema judicial destaca avances
significativos, particularmente en el uso de la IA y el análisis de grandes
volúmenes de datos, como se discute en la literatura reciente. La IA, al
automatizar tareas que anteriormente necesitaban de la cognición humana, ha manifestado
ser un recurso útil para la predicción de sentencias y el soporte en la toma de
decisiones judiciales. Martínez (2019) y González y Martín (2017) subrayan cómo
estas tecnologías permiten un manejo más eficiente de los casos y ofrecen a
jueces y abogados la posibilidad de basar sus argumentos en datos más concretos
y analíticos, lo que podría llevar a decisiones más justas y fundamentadas.
Los resultados relacionados con los
beneficios y riesgos exigen una reflexión cuidadosa. Entre los beneficios más
destacados se encuentran la eficiencia y la seguridad en la toma de decisiones,
ya que la IA procesa grandes volúmenes de información de manera rápida,
reduciendo notablemente los tiempos procesales y estandarizando resultados
(Santos, 2020). Ejemplos concretos en países como Estonia y el Reino Unido
evidencian cómo la automatización ha facilitado el acceso a la justicia y ha
agilizado procedimientos, permitiendo a jueces y abogados concentrarse en
aspectos más críticos de los casos (Navidad, 2021); (Timmers,
2019); (Susskind, 2019). Sin embargo, estos avances
también conllevan riesgos significativos.
Según López y Rodríguez (2018), la
posibilidad de que los algoritmos perpetúen sesgos históricos es un asunto
alarmante, lo que plantea serias preocupaciones sobre la imparcialidad y la
legitimidad del sistema judicial. Pérez y Jiménez (2019) señalan que, al ser
difícil de interpretar, la toma de decisiones automatizadas puede carecer de la
debida transparencia y rendición de cuentas. Esta dependencia creciente de la
automatización podría disminuir la capacidad crítica y el juicio humano,
elementos esenciales en la administración de justicia (Castro y Fernández,
2020).
Por otro lado, los desafíos éticos en el
uso de inteligencia artificial (IA) y automatización en el sistema judicial
ponen de relieve la complejidad y seriedad de los riesgos involucrados,
especialmente en lo que respecta al sesgo algorítmico, la transparencia y la
responsabilidad. La literatura destaca cómo los algoritmos, al ser alimentados
con datos históricos que reflejan discriminaciones sistémicas, pueden no solo
perpetuar, sino intensificar estas injusticias, afectando desproporcionadamente
a grupos étnicos minoritarios en decisiones críticas, como la predicción de
reincidencia criminal (Liu, 2019).
Este análisis está acorde con la
necesidad de que los desarrolladores implanten medidas efectivas para mitigar
estos sesgos y asegurar decisiones justas. Además, la insuficiente transparencia
en la toma de decisiones automatizadas es un grave problema; la opacidad puede
erosionar la confianza pública en el sistema judicial, un elemento principal
para su legitimidad (Timmers, 2019). Estos dilemas
también complican la cuestión de la responsabilidad; identificar quién es
culpable de los errores en decisiones automatizadas es fundamental para
garantizar que se tomen las acciones correctivas necesarias.
El análisis de casos concretos como el
Tribunal de Internet de Hangzhou en China, el sistema e-Justice
en Estonia y el eLitigation de Singapur ilustra el
impacto positivo que las tecnologías emergentes tienen en la eficiencia y
accesibilidad de la justicia. A través de la implementación de soluciones como blockchain y sistemas de gestión electrónica, estos países
han logrado resolver disputas más rápidamente y mejorar la transparencia del
proceso judicial (Liu, 2019; Timmers, 2019; Menon, 2017). Estas experiencias refuerzan la teoría de que
la automatización de tareas y el análisis predictivo, cuando se aplican
adecuadamente, pueden optimizar el funcionamiento del sistema judicial y
ampliar el acceso para los ciudadanos.
En el caso de la celeridad judicial en
Ecuador el estudio revela una intersección crítica entre las normativas
constitucionales, la implementación de tecnologías emergentes y la capacitación
del personal judicial. La Constitución Ecuatoriana y el Código Orgánico de la
Función Judicial establecen claramente que el derecho a un juicio sin
dilaciones indebidas es fundamental para la legitimidad del sistema de justicia
(Asamblea Nacional del Ecuador, 2008, 2009). Sin embargo, la simple adopción de
herramientas tecnológicas, como la IA para la gestión de expedientes y el
análisis predictivo, no garantiza por sí misma la celeridad en los procesos
judiciales (Cano y Arias, 2021); (Navidad, 2021).
Si bien estas tecnologías tienen el
potencial de optimizar la eficiencia procesal y reducir tiempos de respuesta,
la efectividad de su ejecución depende en gran medida de la formación adecuada
del personal. Según Susskind (2019), la capacitación
debe integrar tanto la dimensión técnica como el entendimiento de las
implicaciones éticas, asegurando que la celeridad no comprometa la equidad y
calidad de las decisiones judiciales.
En la discusión de los resultados de
este estudio surgen varias limitaciones. En primer lugar, la dependencia de
algoritmos de IA puede introducir sesgos cuando se utilizan datos históricos
contaminados o incompletos, lo que podría perpetuar desigualdades existentes en
lugar de mitigarlas, desafiando así el objetivo de un sistema judicial
equitativo. Además, la capacitación del personal es necesaria; sin una
formación adecuada, los operadores de justicia pueden no estar preparados para
interpretar correctamente los resultados generados por la IA, lo que podría
obstaculizar la efectividad de estas herramientas.
También es importante que la formación
no solo aborde aspectos técnicos, sino que incluya las implicaciones éticas y
legales del uso de la automatización en el ámbito judicial. Por último, aunque
se subraya la necesidad de un marco normativo sólido para regular estas
tecnologías, aún falta un enfoque sistemático para su implementación y una
evaluación continua de sus efectos. Por lo tanto, el avance hacia una celeridad
judicial efectiva exige el uso de innovaciones tecnológicas y también un
compromiso ético y una capacitación exhaustiva que aseguren que los beneficios
se maximicen y los riesgos se minimicen.
CONCLUSIONES
En el
caso del Ecuador, este principio se encuentra recogido en la Constitución de la
República, particularmente en el artículo 75, que establece el derecho a la
tutela judicial efectiva, y en el artículo 169, que resalta la celeridad como
una característica esencial del proceso judicial. Además, la implementación de
IA también debe alinearse con los fundamentos procesales estipulados en los
artículos del COGEP, como el artículo 2, que promueve
la simplificación y agilidad procesal, y el artículo 140, que regula la
celeridad en la administración de justicia.
El
análisis de la implementación de las tecnologías emergentes, y en particular de
la inteligencia artificial, en la efectividad y rapidez de la resolución de
procesos judiciales, ha revelado que la automatización de ciertas tareas
rutinarias y la capacidad de análisis predictivo que ofrece la IA reduce significativamente
los tiempos de resolución de los casos. La capacidad de la IA para manejar
grandes volúmenes de datos y realizar análisis detallados permite minimizar
errores humanos, proporcionando a los jueces información más precisa y
pertinente para la toma de decisiones.
El
estudio de los sistemas judiciales que han adoptado la inteligencia artificial
y aquellos que siguen operando bajo métodos tradicionales destacan las ventajas
claras que trae consigo la modernización tecnológica. Los sistemas que han
integrado la IA muestran una notable disminución en los tiempos de
procesamiento, una mayor consistencia en las decisiones judiciales y una mejor
gestión de los recursos disponibles.
La
adopción de la IA en el sistema judicial ecuatoriano es un catalizador para
garantizar el principio de celeridad procesal, contribuyendo a un sistema
judicial más ágil, eficiente y justo. No obstante, para maximizar los
beneficios de estas tecnologías, es indispensable que su implementación sea
cuidadosamente planificada, regulada y acompañada de una supervisión constante,
asegurando que la innovación tecnológica en el ámbito judicial no solo respete,
sino que también fortalezca los derechos fundamentales de los ciudadanos.
REFERENCIAS
Aletras, N., Tsarapatsanis,
D., Preoţiuc-Pietro, D., Lampos, V. (2016). Predicting judicial decisions of the European
Court of Human Rights: a Natural Language
Processing perspective. PeerJ
Computer Science 2:e93.
https://acortar.link/J9V7u3
Asamblea Nacional del
Ecuador. (2009, 10 de septiembre). Constitución de la República del Ecuador. https://acortar.link/TEeqLO
Asamblea Nacional del
Ecuador. (2013, 10 de junio). Observaciones al Proyecto de Ley Reformatoria al
Código Orgánico de la Función Judicial. https://acortar.link/cm3hCB
Cano, R y Arias, J. (2021).
La inteligencia artificial en la administración de justicia: Ventajas y
desafíos. Editorial Jurídica.
Castro, A y Fernández, P.
(2020). Automatización judicial: Desafíos y oportunidades para la justicia
digital. Revista Iberoamericana de Derecho, 12(3), 56-62.
Cath, C., Wachter,
S., Mittelstadt, B., Taddeo, M y Floridi,
L. (2018). Inteligencia artificial y la 'buena sociedad': El enfoque de EE.
UU., la UE y el Reino Unido. Science and Engineering Ethics, 24, 505–528. https://acortar.link/lXifGl
Corte Constitucional del
Ecuador. (2013). Sentencias sobre el debido proceso en el sistema judicial.
Boletín de Jurisprudencia Constitucional, 34(4), 75-81. https://acortar.link/QTOS4t
Corte Interamericana de
Derechos Humanos (Corte IDH). (1999). Caso Suárez Rosero vs. Ecuador. Sentencia
del 12 de noviembre de 1997. https://acortar.link/G6HB62
Frey, C y Osborne, M.
(2017). El futuro del empleo: ¿Qué tan susceptibles son los trabajos a la
computarización? Technological Forecasting
and Social Change, 254-280. https://acortar.link/k9DOex
González, M. (2021).
Automatización en la justicia: La IA como herramienta complementaria en la
administración judicial. Revista Derecho y Tecnología, 45-59.
González, M y Martín, J.
(2017). Predicciones judiciales mediante algoritmos de inteligencia artificial.
Ediciones Jurídicas.
Goodman, B y Flaxman, S (2017). European Union regulations on algorithmic decision-making and a “right to explanation”. https://acortar.link/VFgzNt
Katz, D., Bommarito, M y Blackman, J
(2017). Predicción del comportamiento de la Corte Suprema de los Estados
Unidos: Un enfoque general. PLOS ONE,
12(4), e0174698. https://acortar.link/ogBRZo
Liu, S. (2019). Tecnología blockchain y su aplicación en el sistema judicial de China.
Asia Pacific Law Review, 27(1), 34-60. https://acortar.link/Phcrbq
López, J y Rodríguez, A.
(2018). COMPAS y la inteligencia artificial en la predicción de decisiones
judiciales. Editorial Jurídica Nacional.
Martínez, L. (2019).
Inteligencia artificial y big data en el sistema
judicial: Análisis de casos. Ediciones Jurídicas.
Menon, S. (2017). El papel de la
tecnología en la modernización del poder judicial: Un estudio de caso de
Singapur. Singapore Law Journal, 25, 72-83.
Navidad, F (2021). La
tecnología blockchain en la industria 4.0.
Universidad de Jaén. Repositorio de la ujaen. https://acortar.link/6IIK8v
Pérez, L y Jiménez, D.
(2019). Problemas éticos en la automatización judicial. Revista de Derecho
Comparado, 14, 42-48.
Santos, P. (2020). Celeridad
y automatización en la justicia: Oportunidades y desafíos. Revista
Iberoamericana de Derecho, 132-140.
Surden, H. (2014).
Aprendizaje automático y derecho. Washington Law Review, 89(1), 87-113. https://acortar.link/5ZeHQd
Susskind, R. (2019). Tribunales en
línea y el futuro de la justicia. Oxford University Press. https://acortar.link/MJHm6A
Timmers, P. (2019). Digitalización
y su impacto en los sistemas judiciales de Estonia y el Reino Unido. Revista
Internacional de Derecho, 100-120. https://acortar.link/Sax8wu
Vega, M. (2023). Atención al
ciudadano y tecnología: Uso de chatbots en la
justicia ecuatoriana. Revista de Innovación Legal, 45-55.
Završnik, A. (2020). Justicia penal,
sistemas de inteligencia artificial y derechos humanos. ERA Forum,
21(1), 129–144. https://acortar.link/PZ51UC